Benzemá anotó nada más salir al campo
Vuelve la Champions para el Madrid y le esperaba su bestia negra, el Olympique de Lyon. Los Blancos nunca había puntuado en ese campo y ayer al fin lo consiguió. Mou sacó un equipo bastante ofensivo cuando todos apostaban por el trivote o por Marcelo en el medio, y Adebayor ganó a Karim en la punta de ataque.
Una primera parte totalmente física, sin ocasiones claras para ninguno de los equipos y con juego muy parado. Pero en la segunda mitad el juego fluyó mucho más y con ello las oportunidades de gol. En tan solo 2 minutos el Madrid tiró 2 tiros al palo, uno de Ronaldo de falta y otro de Ramos a la salida de un córner. Poco después el árbitro se tragó un penalti por mano en la barrera de una falta, un partido nunca está completo sin polémica.
Pasada la hora de partido Adebayor dejó su hueco a Benzemá, que volvía a su casa y por la puerta grande ya que el primer balón que tocó lo condujo hasta el fondo de la red, haciendo saltar hasta a Florentino en el palco. A partir de ese momento el Lyon se tiró arriba colgando balones y balones, uno de ellos cayó perfecto a Gomis, que andaba solo en el área y solo lo tuvo que empujar para empatar el encuentro y dar esperanzas a su club.
No es mal resultado para los Merengues, pero se tendrá que andar con mucho cuidado ya que un solo gol de los franceses pondrían las cosas muy difíciles. El Bernabéu dictará sentencia.
O.Lyon 1-1 Real Madrid
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